Todo el proyecto de esta vivienda giró entorno al elemento principal de su reforma: la escalera. Diseñada desde cero, de la mano del cliente, escuchando sus necesidades y el objetivo a alcanzar, estudiando todos los elementos que la componen, sus materiales y acabados, y cuidando todos y cada uno de los detalles se creó esta pieza especial y única. Peldaños de acero lacados con “pintura epoxi” color antracita, volados, independientes, encastrados en el muro que envuelve el hueco de escalera y flanqueados por una barandilla de vidrio extraclaro; ambos componentes situados sobre un fondo muy natural definido por un plano vertical continuo de 7 metros de altura forrado con listones de piedra natural y un plano horizontal, en la planta inferior, con piedras blancas de canto rodado ocultando unos focos directos que crean el espectacular efecto de luces. Toda una obra de arte que aporta gran personalidad y estilo a este precioso duplex.