La intervención más significativa en este baño fue la ampliación de la ventana existente, la cual se convirtió en un gran ventanal panorámico dentro de la ducha. Gracias a las magníficas vistas del mar y la montaña, conseguimos un efecto cuadro que permite disfrutar de toda una experiencia placentera y relajante. Los acabados de las baldosas en tonos tierra y bronceados contrastan con el blanco de los elementos sanitarios: el inodoro compacto y el gran lavabo de resina; así como con la posterior decoración estilo romántico- vintage aportada por el cliente.